Entendemos por frutas diuréticas aquellas que por su composición bioquímica son capaces de aumentar la función renal y con ello el volumen de orina.
Un consumo adecuado de frutas diuréticas nos ayuda a combatir la retención de líquidos, a eliminar toxinas, a reducir la celulitis y a regular la tensión arterial.
Cómo tomar las frutas diuréticas
A pesar del dulzor de las frutas y de que vienen a ser algo así como "las golosinas de la naturaleza" me sigo encontrando con mucha gente a quienes les da pereza consumirla. Aquí os dejo algunas ideas para consumir fruta más allá del postre:
- Empieza el día con un vaso de agua en ayunas al que habrás añadido un chorrito de zumo de limón para beneficiarte de todas sus propiedades.
- ¿Qué tal desayunar un buen bol de macedonia de fruta fresca con yogur?
- ¿Aún no has probado los "green smoothies"? ¡Son la última tendencia! A base de agua, fruta fresca, hortalizas, zumo de limón y una pizca de jengibre rallado. Alcalinizan, drenan, detoxifican, aportan un "chute" de vitaminas y minerales, son muy digestivos, y están riquísimos.
- También puedes incluir fruta en tus platos preferidos: gazpacho de sandía, pollo con piña, tarta de arándanos, etc.
Algunas de las frutas más diuréticas
- Limón: La adición de limón al agua no sólo le aporta sabor sino que nos ayuda a alcalinizar el organismo, tiene un gran efecto depurativo a nivel renal e intestinal e incluso nos puede ayudar si tenemos la tensión arterial elevada. Por otro lado aliñar nuestros platos con limón nos ayuda (gracias a su ácido ascórbico) a digerir las proteínas y a absorber mejor el hierro de los alimentos.
- Naranja: Por su elevado contenido en agua, potasio y ácido cítrico, las naranjas no sólo tienen efecto diurético sino que, al igual que el limón, alcalinizan la sangre y ayudan a absorber el hierro dietético. Además, las naranjas son un buen aliado en caso de gota porque favorecen la eliminación de ácido úrico y sus sales.
- Sandía: La sandía contiene nada más y nada menos que un 95% de agua además de ser rica en potasio. Su consumo habitual nos va a ayudar a que nuestro cuerpo elimine el exceso de sal y de líquidos. Consumirla fresquita en verano es una delicia, pues su frescor y su dulzura la hacen una fruta que gusta a toda la familia. Es una fruta ideal para llevar en nuestras excursiones a la playa o a la montaña para mantenernos bien hidratados.
- Piña: La piña es una de las frutas depurativas por excelencia, no en vano existen multitud de dietas "exprés" que utilizan esta fruta como base de la misma. Esto es debido a que contiene enzimas digestivas que mejoran la función intestinal, reduciendo las fermentaciones que tanto nos hinchan, además activa el metabolismo y tiene efecto diurético, por lo que es una fruta perfecta para realizar semi-ayunos detoxificantes.
- Arándanos: Es de sabiduría popular que los arándanos ayudan a tratar las infecciones del tracto urinario. Eso es en parte debido a que actúan como un diurético pero también por su acción antibacteriana y antiséptica. Por si fuera poco, los arándanos nos proporcionan valiosos antioxidantes para luchar contra los radicales libres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario