viernes, 8 de junio de 2018

Alimentos para controlar tus niveles de glucosa



Con el fin de regular los niveles de glucosa en sangre es importante que incluyamos en la dieta alimentos ricos en fibra, que además nos aportarán sensación de saciedad

La diabetes está considerada como una de las enfermedades más graves a nivel mundial, la cual podría afectar a cerca de 370 millones de personas en el año 2030. En términos generales, la diabetes es un conjunto de trastornos metabólicos que afectan permanentemente distintos tejidos y órganos del ser humano y que se caracteriza por el aumento en los niveles de glucosa en la sangre.
Este padecimiento provoca una mala producción de insulina, tanto en cantidad como en calidad, que es una hormona cuya función es la de regular precisamente los niveles glucémicos en la sangre. Conoce los mejores alimentos para personas con diabetes.
Actualmente la diabetes se clasifica en cuatro grandes grupos: la diabetes tipo 1, donde las personas que la padecen deben suministrarse insulina, ya que su cuerpo no la produce; la diabetes tipo 2, la cual solo necesita de medicamentos que regulan la glucosa; la diabetes gestacional, que aparece principalmente durante el embarazo y, por último, algunos otros tipos menos conocidos de diabetes. Por su parte, entre los síntomas más comunes de la diabetes podemos mencionar la poliuria o emisión excesiva de orina, el aumento anormal de las ganas de comer, el incremento de la sed y la repentina pérdida de peso.
Aunque la diabetes tiene un componente genético, algunas de las causas más comunes para desarrollar esta enfermedad son tener una mala alimentación, abusar de grasas y azúcares, tener una vida sedentaria y no realizar ejercicio. La diabetes afecta principalmente los ojos, el sistema nervioso, los riñones y los vasos sanguíneos. De hecho, la falta de atención puede volver mortal a esta enfermedad. Lamentablemente, hasta el momento no se ha encontrado una cura. Es por ello que es muy importante realizarnos análisis médicos y, en caso de padecerla, seguir las recomendaciones de los especialistas.
Evidentemente, los diabéticos no deben de consumir alimentos que sean ricos en azúcares o grasas, ni mucho menos consumir bebidas como refrescos o grandes cantidades de alcohol. A continuación te presentamos una lista, elaborada por la Asociación Americana de la Diabetes, de aquellos alimentos que son buenos para las personas que padecen esta enfermedad:

1. Cítricos

Naranja
Las frutas que contienen una gran cantidad de vitamina C y fibra soluble son muy recomendables para los diabéticos. La vitamina C es muy buena para el crecimiento y regeneración de tejidos, por lo que es de gran ayuda para la cicatrización y fortalecer huesos, dientes, tendones, cartílagos y ligamentos. Cabe recordar que, al ser hidrosoluble, la vitamina se debe de consumir frecuentemente. Por su parte, la fibra regula los niveles de azúcar en la sangre, además de que provoca una sensación de saciedad.

2. Pescados ricos en omega 3

Pescados como el salmón, la trucha, la sardina, el atún y el hígado de bacalao contienen una buena cantidad de ácidos grasos omega 3. Estos últimos ayudan a combatir el denominado colesterol malo, además de que pueden ayudar a prevenir la diabetes tipo 2. En el caso de las personas que ya padecen esta enfermedad, el omega 3 reduce la presión arterial, los niveles de triglicéridos en la sangre y previene contra enfermedades cardiovasculares y coronarias.

3. Vegetales de hoja verde

Espinaca
Este tipo de alimentos son muy nutritivos gracias a que contienen vitaminas A, B, C, E y K, muchos minerales (especialmente hierro, calcio, fósforo, magnesio, sodio y potasio), además de que tienen un bajo contenido calórico. Para los diabéticos, la vitamina A es muy buena para tener una buena vista y combatir las infecciones de la piel. Por su parte, los minerales fortalecen la sangre y los huesos. Los vegetales más recomendables al respecto son las espinacas, la col y la acelga.

4. Bayas

Alimentos como las fresas, los arándanos, las frambuesas y las moras contienen vitamina C, potasio, fibra y antioxidantes. Esto últimos ayudan a contrarrestar el daño causado por los radicales libres, que son los responsables del envejecimiento y de ciertas enfermedades graves como el cáncer, la artritis y distintas cardiopatías. Por si fuera poco, las bayas disminuyen los daños provocados por químicos como el humo del cigarrillo, además de que fomentan una mejor comunicación celular.

5. Productos lácteos bajos en grasa

Yogurt
Según investigaciones recientes, el consumo de vitamina D, además de fortalecer los huesos y dientes, ayudó a producir una mayor cantidad de insulina en pacientes prediabéticos. Por lo tanto, esa vitamina hace que nuestro cuerpo metabolice mejor los azúcares.

https://mejorconsalud.com

jueves, 7 de junio de 2018

Aceite de Ricino


El aceite de ricino es un triglicérido, compuesto de ácidos grasos esenciales. El 90% de estos ácidos grasos está compuesto por ácido ricinoleico (omega 9). Tiene vitamina E, que actúa como antioxidante protegiendo las células.

- Propiedades:

Hidratante y antiarrugas

Ideal para erupciones cutáneas, irritaciones y picaduras de insectos.

Estimula el crecimiento de las pestañas. aplicado en la raíz de la pestaña, en la noche, con un suave masaje. Se puede usar también en la ceja en caso de tenerlas finas y despobladas, estimulando su crecimiento.

Es excelente para hidratar las cutículas de las uñas. Ahora que viene el verano y llevamos sandalia, nos ayudará a lucir unas uñas hidratadas, fuertes y con un aspecto saludable.
Esas son algunas de las propiedades....pero tiene muchísimas más.

miércoles, 6 de junio de 2018

Albóndigas de quinoa y garbanzo fáciles de preparar


Las albóndigas de quinoa y garbanzo son una receta nutritiva y ligera que también podemso disfrutar si no comemos carne, puesto que no incluyen alimentos de origen animal
Os mostramos una receta fácil y rápida para preparar unas deliciosas albóndigas de quinoa y garbanzo. Serán un plato perfecto para cualquier comida o cena.

Ingredientes para las albóndigas de quinoa y garbanzos

Las cantidades que especificamos a continuación rendirán para unas 6 albóndigas de tamaño regular, aunque siempre podemos adaptar los ingredientes a nuestras necesidades específicas.

Para las albóndigas

  • 1 taza de garbanzos (180 g)
  • 1 taza de quinoa (200 g)
  • ½ taza de pan rallado (75 g)
  • 1 diente de ajo
  • 1 cucharada de salsa de soja (15 ml)
  • 2 cucharaditas de cilantro (10 g)
  • 1 pimiento rojo
  • ½ cucharadita de sal (2 g)
  • ½ cucharadita de pimienta negra (2 g)

Para la salsa de acompañamiento

  • 1 diente de ajo
  • 4 tomates
  • 1 cebolla
  • 1 pastilla para preparar caldo de verduras
  • 2 cucharadas de aceite de oliva (30 ml)
  • 1 zanahoria grande

Preparación de las albóndigas de quinoa y garbanzo

  • Comenzaremos la elaboración de estas deliciosas albóndigas poniendo a remojo los garbanzos. Lo ideal será dejarlos varias horas en agua caliente, para que se ablanden adecuadamente y después sean más fáciles de cocinar.
  • Cuando los garbanzos vayan llegando a su punto, podemos ponerlos a cocer en una olla con agua hirviendo durante unos 60 minutos. En este tiempo, podremos ir preparando las verduras y la quinoa.
  • Por un lado, ponemos a hervir la quinoa en una olla con agua suficiente. Bastará con unos 5 minutos para que la quinoa esté lista.
No obstante, podemos controlar el punto de cocción fijándonos en que los granos de quinoa dejen ver unos pequeños anillos blanquecinos. Cuando esté lista, la retiramos del fuego para que se vaya enfriando ligeramente.
  • Por otro lado, cortaremos el pimiento rojo y el cilantro en trocitos muy finos y los reservaremos. Cuando los garbanzos estén listos, los meteremos en un vaso de batidora junto con el ajo y lo trituraremos hasta obtener unas pasta homogénea.
  • Verteremos esta salsa en un bol aparte donde la mezclaremos con la quinoa y el pimiento. También iremos añadiendo poco a poco el cilantro, la salsa de soja y el pan rallado, a medida que amasamos todo el conjunto para que los ingredientes se integren bien en la mezcla.
  • Una vez mezclados, los dejaremos refrigerar en la nevera durante unos 30 minutos.
Quinoa rica en fibra.

Preparación de la salsa

Una opción interesante para la salsa de acompañamiento de estas albóndigas de quinoa y garbanzo es elaborarla con los ingredientes que hemos enumerado.
  • Para prepararla, licuaremos el tomate, el diente de ajo, la cebolla y la zanahoria. A esta mezcla le añadiremos una taza de caldo de verduras, preparada con la pastilla para caldo.
  • A continuación, ponemos a calentar el aceite de oliva en una sartén con fuego medio-alto, y echamos la salsa. Dejaremos que se cocine la salsa y se reduzca durante unos 10 minutos.
Salsa de tomate casera antioxidante y anticancerígena
De esta manera podremos conseguir que se intensifique el sabor y la salsa obtenga una textura más espesa.
  • Pasado este tiempo, sacamos las albóndigas de la nevera y formamos con ella pequeñas bolas, que iremos añadiendo a la sartén con la salsa.
  • Dejaremos que se cocinen en conjunto durante un tiempo de entre 3 y 5 minutos, controlando el punto de cocción según se vayan cocinando por fuera.

Opción con salsa de tomate y coco

Una segunda opción para la salsa de las albóndigas será una elaboración con tomate y leche de coco.

Ingredientes

  • 2 tomates
  • 1 taza de leche de coco ( 250 ml)
  • Orégano, sal y pimienta (al gusto)
  • 1 cucharadita de curry (5 g)
  • 1 cucharada de aceite de oliva (15 ml)

Preparación

  • Para preparar esta salsa, bastará con comenzar por lavar los tomates y pelarlos. Después, los añadiremos en el vaso de la batidora junto con la leche de coco y las especias, y batiremos todo el conjunto hasta conseguir una salsa homogénea.
  • A continuación, vertemos el contenido de este vaso en una sartén con el aceite de oliva caliente y dejamos que, como la salsa anterior, se cocine y se reduzca durante unos 10 minutos.
  • Tras este tiempo, echaremos las albóndigas en la salsa y dejaremos que se cocinen en ella durante unos 5 minutos.
Cualquiera de las dos salsas será un acompañamiento delicioso para las albóndigas de quinoa y garbanzo, cada una con sus sabores y matices diferentes.
Como guarnición para las albóndigas, una buena opción puede ser preparar una pequeña cantidad de arrozblanco o integral, o bien un poco de ensalada verde.

https://mejorconsalud.com

martes, 5 de junio de 2018

4 ejercicios para mejorar el suelo pélvico



El fortalecimiento de los músculos del suelo pélvico puede ayudar a prevenir el desarrollo de enfermedades mientras mejorar la calidad de vida sexual. Te compartimos los ejercicios más recomendados

Los ejercicios para mejorar el suelo pélvico sugieren un entrenamiento que ayuda a aumentar la fuerza de los músculos ubicados bajo el útero, la vejiga y el intestino grueso. Aunque son una herramienta terapéutica contra ciertas enfermedades, algunos los aplican como aliados para el placer sexual.
De hecho, estas prácticas se han empleado desde la antigüedad en muchas culturas del mundo. No obstante, su popularidad se empezó a incrementar solo desde el siglo pasado, gracias a los aportes del Dr. Arnold Kegel, quien los destacó como una terapia muscular efectiva.
En la actualidad, se incluyen en muchas rutinas de ejercicio regular, ya que tienen interesantes beneficios tanto para el cuerpo como para la vida íntima. Además, son aptos para hombres y mujeres y se pueden poner en práctica desde cualquier lugar. ¿Te animas a intentarlos?

Beneficios de hacer ejercicios para mejorar el suelo pélvico


ejercicio-suelo-pelvico

El entrenamiento del músculo del suelo pélvico o músculo pubococcígeo, ha ganado mucha importancia en los últimos años. Dado que hay muchos factores que tienden a debilitarlo, se han diseñado una amplia variedad de actividades que contribuyen a fortalecerlo.
Si bien su objetivo principal es prevenir y tratar enfermedades como la incontinencia urinaria y fecal, también brindan otros destacados beneficios. De hecho, se recomiendan para mejorar la calidad de vida sexual y como apoyo para la salud antes y después del parto.
En resumen, las razones para hacer estos ejercicios son:
  • Mayor control sobre los esfínteres
  • Recuperación del tono de los músculos pélvicos
  • Menor riesgo de partos complicados
  • Reducción del riesgo de prolapso (salida hacia el exterior de órganos como el útero y la vejiga)
  • Mejor rendimiento y más placer durante las relaciones sexuales

Ejercicios recomendados para mejorar el suelo pélvico

Tal y como ocurre con otros músculos del cuerpo, los ubicados en el suelo pélvico requieren un “entrenamiento” para mantenerse tonificados y fuertes. Muchos de los ejercicios que hoy se recomiendan fueron desarrollados por el ginecólogo estadounidense Arnold Kegel.
No obstante, algunos han sido ‘reajustados’ o se han perfeccionado con distintas técnicas. Además, también se han añadido otros tipos de actividades que brindan beneficios similares. Repasemos a continuación las más importantes.

Ejercicios Kegel


Las mejores poses de yoga.

Para empezar esta sencilla rutina proponemos realizar uno de los ejercicios básicos de Kegel. Como lo dijimos, hay varios métodos para hacerlos, ya que durante años se han variado las posturas y técnicas de los mismos.

¿Qué debes hacer?

  • Siéntate con las piernas cruzadas en el suelo o una superficie cómoda como una colchoneta de yoga.
  • Contrae los músculos de la pelvis, vagina y ano tanto como puedas.
  • Mantén la tensión durante 3 o 5 segundos y relaja por completo el cuerpo.
  • Realiza entre 10 y 12 repeticiones, combinándolas con una respiración profunda.

Puente de glúteos

Uno de los ejercicios imprescindibles en una rutina para mejorar el suelo pélvico es el puente de glúteos. Esta actividad ayuda a endurecer los glúteos, pero también se centra en el trabajo del suelo pélvico, reforzando los órganos sexuales.

¿Qué debes hacer?

  • Acuéstate boca arriba, pon los brazos a los costados del cuerpo y flexiona las rodillas.
  • Eleva la pelvis en dirección al techo, de tal modo que el cuerpo quede despegado del suelo.
  • Contrae los músculos abdominales y glúteos, y sostén la posición 5 segundos.
  • Regresa al suelo y realiza 15 repeticiones.

Elevaciones de pierna


elevar-piernas-cama

La postura que se adquiere en este ejercicio permite mejorar el suelo pélvico y fortalecer la pared abdominal y los glúteos. No obstante, para lograr un buen efecto es importante tensar el cuerpo mientras se realiza.

¿Qué debes hacer?

  • Tumbada sobre tu espalda, con el abdomen contraído, levanta las piernas hacia el techo con un movimiento lento. Puedes levantar cada una de manera alterna o las dos al tiempo.
  • Asegúrate de mantener las piernas rectas para sostener la tensión unos segundos.
  • Regresa a la posición inicial y haz 15 repeticiones.

Abdominales en V


abdominales-v

Los abdominales en V son una versión un poco más avanzada del clásico ejercicio para el vientre. Aunque requieren un poco de fuerza y equilibrio, son ideales para mejorar el suelo pélvico e incrementar la resistencia al tener relaciones sexuales.

¿Qué debes hacer?

  • Ponte boca arriba sobre la colchoneta, con los brazos a los costados del cuerpo y las piernas estiradas.
  • A continuación, contrae el abdomen y flexiona las rodillas para formar un ángulo de 45º con las piernas y caderas.
  • Eleva el tronco hacia arriba, de tal modo que todo el cuerpo quede formando una V.
  • Vuelve a la posición inicial lentamente y haz 12 repeticiones.

En resumen

La práctica regular de estos ejercicios para mejorar el suelo pélvico es una medida efectiva para evitar la pérdida de control sobre los esfínteres y algunas disfunciones sexuales. Lo mejor de todo es que se practican en cuestión de minutos sin necesidad de herramientas profesionales.

https://mejorconsalud.com

Menopausia: remedios naturales efectivos para tratarla


Es normal que, con el paso de los años, nuestro cuerpo deje de producir ciertas sustancias, lo cual trae consigo varios síntomas que responden a estas pérdidas
No es realmente correcto llamar enfermedad a la menopausia, ya que es un proceso natural que sobreviene a todas las mujeres cuando llegan a cierta edad y con esta se para la formación de óvulos. Sin embargo, no podemos obviar que esta a su vez  llega acompañada de síntomas muy molestos.
En este artículo te enseñaremos todo lo que debes saber sobre esta condición y la forma más efectiva para afrontarla con remedios caseros.

Síntomas de la menopausia

Al acercarse la menopausia, edad crítica o cambio de vida, es frecuente que haya irregularidad en las fechas y en la cantidad del flujo menstrual. Son cada vez más los períodos omitidos, hasta que cesan por completo.
La facultad de reproducción puede perderse antes que aparezcan los desórdenes menstruales, aunque no ocurre generalmente así, y hasta puede darse el caso de que subsista la mencionada facultad cuando ya cesó la menstruación.
Algunos de los síntomas que aquejan a muchas mujeres en esta época de la vida son:
  • Sensaciones de frío
  • Oleadas de calor
  • Pérdida o aumento de peso
  • Apetito caprichoso
  • Náuseas y vómitos
  • Palpitaciones del corazón
  • Dolor de cabeza y de espalda
  • Debilidad
  • Depresión
  • Desmayos
  • Vértigos
  • Estreñimiento o diarrea
  • Sensibilidad en los pechos
  • Histerismo y otras manifestaciones nerviosas
Casi cualquier síntoma que antes haya aquejado, tiende a presentarse de nuevo y de forma intensificada durante la menopausia.
Las oleadas de calor o fogajes son el síntoma más común de la menopausia y uno de los más molestos. Se pueden presentar cuando todavía las mujeres tienen ciclos menstruales, es decir, en el período llamado premenopausia (3-4 años) previos a la desaparición completa de las menstruaciones y pueden durar más de 5 años después de comenzada la menopausia.
Pueden aparecer a cualquier hora del día, pero predominar en la noche, como una sensación de aumento de temperatura corporal en la parte superior del cuerpo, como rostro y cuello.
Dura en promedio entre 2 a 5 minutos, y se acompañan de sudoración y palpitaciones. Con frecuencia suceden al dormir y despiertan a las mujeres varias veces en la noche. Así, causa fatiga, falta de sueño y hace que las prendas de vestir y ropa de cama acaben bañados en sudor.

Causas

La menopausia resulta de los cambios físicos que trae la edad en el cuerpo de la mujer. Por lo general culminan en algún momento entre los 40 y los 50 años, aunque a veces el cambio se presenta más temprano y ocasionalmente más tarde.
En algunas mujeres, se inicia temprano y termina pronto, habiendo presentado pocos síntomas perturbadores. Generalmente se necesitan de pocos meses a uno o dos años para que desaparezcan  las irregularidades nerviosas y menstruales.

¿Qué debe hacerse?

Estos hábitos mejorarán la salud en general y harán menos pronunciados los síntomas de la menopausia:
  • Un trabajo liviano
  • Mucho ejercicio al aire libre
  • Mucho reposo y sueño
  • Un régimen alimentario sano
  • Tomar el sol 15 minutos al día
 En cuanto a la salud sexual, se deben utilizar lubricantes, para evitar que sus relaciones resulten dolorosas. Asimismo, hay que tonificar la vagina por medio de ejercicios de suelo pélvico, que ayudan a disminuir la pérdida de orina.
Esta también es una buena época para los juegos en pareja, la imaginación la comunicación o el probar nuevas experiencias. La sexualidad se vive plenamente en esta época, porque ya no hay riesgo de un embarazo.

Remedios naturales para la menopausia

Clavos rojos

Clavos rojos
Entre sus propiedades naturales, encontramos que estos contienen pequeñas cantidades de isoflavonas, las encargadas de disminuir la severidad de los sofocos causados por la menopausia.

Ingredientes

  • 1 cucharadita de clavos rojos (5 g)
  • 1 taza de agua (250 ml)

Preparación

  • En un recipiente ponemos a hervir la taza de agua y, cuando llegue a ebullición, agregamos los clavos.
  • Dejamos infusionar 2 o 3 minutos y retiramos del fuego. Después, dejamos reposar durante 10 minutos y colamos.
  • Tomamos tres veces al día, 30 minutos antes de cada comida.

Alfalfa

Alfalfa
Esta planta cuenta con muchos beneficios medicinales naturales. Tiene la capacidad de anular la disminución de los niveles de estrógenos, responsables de los sofocos de la menopausia.

Ingredientes

  • 1 cucharada de alfalfa (10 g)
  • 1 taza de agua (250 ml)

Preparación

  • En un recipiente calentaremos el agua con  la alfalfa.
  • Cuando hierva, retiramos del fuego.
  • Dejamos reposar y colamos.
  • Debemos tomarla por la noche, antes de irnos a dormir.

Cardamomo

Es otra de las plantas que ayuda a la mujer a ser más llevaderos los síntomas de la menopausia. Destaca por sus propiedades estrogénicas,  ya que contiene estigmasterol y nerol.

Ingredientes

  •  1 cucharada de cardamomo (15 g)
  • 1 taza de agua (250 ml)

Preparación

  • Calentaremos el agua y llevaremos a ebullición.
  • A continuación, añadiremos el cardamomo, taparemos y dejaremos reposar 10 minutos.
  • Tomaremos la infusión por la mañana y por la noche.
Las alternativas naturales son muy adecuadas para tratar este tipo de condición. Recomendamos seguir los consejos brindados y aprovechar los remedios aprendidos para sobrellevar sus síntomas.

https://mejorconsalud.com