Un desayuno de alta calidad nutricional ayuda a cuidar la línea y mejora la actividad del metabolismo para adelgazar. Aunque se ha ignorado por mucho tiempo, es una comida irremplazable.
El consumo diario de un desayuno de buena calidad es una de las claves para cuidar la línea. Aunque es necesario combinarlo con otros buenos hábitos, esta primera comida es determinante para impulsar el metabolismo.
Los nutrientes que se obtienen a primera hora son los que sirven como “combustible” para que el organismo trabaje sin dificultades. Por eso, no es correcto reemplazarlo con alimentos procesados, y mucho menos ignorarlo para “ahorrar calorías”.
Es cierto que durante muchos años se le restó importancia dentro de las dietas. Sin embargo, hoy ha ganado relevancia y se considera clave en cualquier plan para bajar de peso. ¿Cómo se debe diseñar para que sea beneficioso? No se trata de hacer cualquier elección de alimentos.
Si bien nos han acostumbrado a prepararlo con productos industriales y alimentos prefabricados, la mejor forma de aprovecharlo es con ingredientes sanos. A continuación te compartimos 5 sencillas reglas que puedes aplicar si buscas cuidar la línea.
¿Por qué es importante desayunar?
Mantener un desayuno saludable es uno de los hábitos que ayudan a luchar por una buena calidad de vida. Debido a los aportes de nutrientes que le confiere al organismo, es esencial para activar el metabolismo y mejorar la productividad física y mental.
Un buen desayuno debe corresponder al 25% de la ingesta total de calorías diarias. Así, al recargar el cuerpo desde la mañana, optimiza el gasto energético y apoya los procesos que permiten quemar grasa. Entre otras cosas, es la mejor manera de frenar la ansiedad, pues evita que reaparezca el hambre de forma recurrente.
Otros beneficios de desayunar
- Apoya la formación de masa muscular.
- Reduce el estrés y mejora la salud emocional.
- Previene los trastornos alimentarios y deficiencias nutricionales.
- Evita la sensación de cansancio matinal.
- Mejora la salud digestiva.
- Fortalece el sistema inmunitario y reduce el riesgo de infecciones.
- Favorece la concentración y protege la salud cognitiva
Reglas para un desayuno para cuidar la línea
Algunas personas llegan a pensar que la mejor forma de cuidar la línea con el desayuno es optando por alimentos de muy pocas calorías. De hecho, aún hay quienes creen que pueden alcanzar más éxito en su dieta cuando lo pasan por alto cada mañana.
No obstante, lejos de causar algún beneficio, estas malas decisiones suelen traer consigo efectos contraproducentes. Aunque de momento parecen lo mejor para evitar el sobrepeso, las reacciones posteriores que producen en el cuerpo echan a perder cualquier esfuerzo.
Entonces… ¿Cómo debe ser un desayuno para cuidar la línea? Ciertamente no es hacer cosas del otro mundo. Tan solo basta con prestar atención al total de calorías recomendadas y a los alimentos que se combinan en cada plato. Aplica los siguientes consejos.
1. Incorpora alimentos con fibra
Los alimentos ricos en fibra suelen ser carbohidratos complejos que llenan de energía el organismo. Gracias a esto, y a su capacidad para mejorar la digestión y frenar la ansiedad, son ideales para toda dieta para cuidar la línea.
Algunas recomendaciones son:
- Cereales integrales
- Vegetales de hojas verdes
- Pan integral
- Quinoa
- Frutas
2. Consume más proteína
Algunas personas limitan el contenido de proteína en su desayuno por temor a sobrepasarse con las calorías. No obstante, si de cuidar la figura se trata, es uno de los nutrientes que se deben añadir en su justa medida, sin excepción.
Su correcta asimilación aumenta el gasto energético celular y apoya las funciones del metabolismo para adelgazar. Además, también interfieren en la formación de masa muscular y son idóneas para detener la ansiedad.
Algunas fuentes saludables son:
- Huevos
- Aguacate
- Carnes magras
- Pescados
- Arroz integral
- Frutos secos y semillas
- Alga espirulina
- Germinado de soja
- Legumbres
- Yogur natural
3. Evita los alimentos procesados
El mercado está invadido con una amplia variedad de alimentos procesados que parecen una buena opción para el desayuno. El inconveniente es que muchos de estos productos son refinados y ricos en sodio, lo que puede afectar tanto el peso como la salud.
Trata de evitar al máximo comidas como:
- Carnes embutidas
- Pan y bollería industrial
- Bebidas azucaradas
- Productos “light”
- Cereales azucarados
- Frutas en almíbar y mermeladas
4. Consume agua
Una adecuada hidratación brinda muchos beneficios al momento de cuidar la línea. Primeramente ayuda a estimular la eliminación de toxinas de la sangre, lo cual mejora la salud digestiva y renal. También combate la retención de líquidos y aumenta la sensación de vitalidad.
- Asegúrate de tomar un vaso de agua en ayunas y otros dos vasos durante el desayuno.
5. Incluye grasas saludables
Eliminar la totalidad de las grasas de la dieta no es una opción para evitar el sobrepeso. Si bien es cierto que se debe moderar al máximo su consumo, la cuestión es saber elegir las fuentes de grasas “insaturadas” o grasas “buenas”. En el desayuno puedes incluir algunas opciones, aunque siempre en porciones pequeñas.
Opta por alimentos como:
- Semillas de chía o linaza
- Salmón o atún
- Almendras o nueces
- Aceite de oliva
- Aguacate
¿Qué tan saludable estás desayunando? Si no estás cumpliendo con estas reglas, empieza a corregirlo desde ahora. Tan pronto como empieces a mejorarlo podrás sentir todos esos beneficios para cuidar la línea y salud.
https://mejorconsalud.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario