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Wayne Dyer - "EL CÓDIGO DE SANACIÓN EMOCIONAL" C.S.E.
Si no estás preparado para el Espíritu, lo más probable es
que no sientas el resplandor de la inspiración. Dios estará a tu lado, te
enviará la orientación, y las personas, que necesitas; pero si estás
completamente ocupado, te perderás de estos regalos que pueden transformar tu
vida.
1. Ordena tu vida, sentirás una gran oleada de inspiración
cuando te deshagas de cosas que ya no son útiles en tu vida:
• Regala las cosas que llevas uno o dos años sin utilizar.
• Regala esos archivadores viejos que ocupan espacio y que
casi nunca utilizas.
• Dona juguetes, herramientas, libros, bicicletas y platos
que no utilices a instituciones de caridad.
Elimina todo aquello que te despierte el deseo de adquirir
objetos que contribuyan a una vida desordenada. Recuerda lo que dijo Sócrates:
"Está más cerca de Dios quien necesita menos". Así que mientras menos posesiones
necesites asegurar, cuidar, desempolvar, organizar y mover, más próximo estarás
a escuchar el llamado de la inspiración.
2. Elimina de tu agenda las actividades y obligaciones
innecesarias e indeseables.
Si no estás preparado para el Espíritu, lo más probable es
que no sientas el resplandor de la inspiración. Dios estará a tu lado, te
enviará la orientación, y las personas, que necesitas; pero si estás
completamente ocupado, te perderás de estos regalos que pueden transformar tu
vida. Así que dile no a las exigencias excesivas, y no te sientas culpable de
inyectar una dosis de tiempo libre a tu rutina diaria.
3. Asegúrate de que tu tiempo libre sea libre
Ten cuidado con esas invitaciones que pueden mantenerte en la
cúspide de la pirámide social, pero que te impiden el acceso a una inspiración
gozosa. Si los cócteles, las reuniones sociales, los eventos para recaudar
fondos, e incluso charlar y beber con los amigos no es la forma en que realmente
quieres pasar tu tiempo libre, no lo hagas. Rechaza las invitaciones que no
activen sensaciones de inspiración.
Creo que pasar una tarde leyendo o escribiendo cartas, viendo
una película con un ser querido, cenar con mis hijos o hacer ejercicio, es más
inspirador que asistir a un evento en el que suelen abundar las conversaciones
inútiles. He aprendido a rechazar esos eventos sin tener que disculparme, y eso
me ha permitido tener más momentos de inspiración.
4. Saca tiempo para la meditación y el yoga
Saca por lo menos 20 minutos diarios, siéntate en silencio y
establece un contacto consciente con Dios. Escribí un libro sobre este tema,
“Cayendo al abismo”, así que no me extenderé más. Sin embargo, diré que he
recibido miles de mensajes de personas de todo el mundo en los que me expresaron
su agradecimiento por haber aprendido a simplificar su vida cuando comenzaron a
meditar. Te invito a que busques un centro de yoga cerca de tu casa y comiences
a practicar con regularidad. Las recompensas son maravillosas: te sentirás menos
estresado y más saludable e inspirado por todo lo que podrás hacer con y por tu
cuerpo en muy poco tiempo.
5. Regresa a la sencillez de la naturaleza
No hay nada que sea más inspirador que la naturaleza. La
fantasía de regresar a una vida menos tumultuosa casi siempre implica vivir en
el esplendor de las montañas, los bosques o de un valle, en una isla, cerca al
mar, o al lado de un lago. Estos deseos son universales, pues la naturaleza ha
sido creada por la misma Fuente que nos creó a nosotros. Estamos constituidos
por las mismas sustancias químicas de la naturaleza (somos polvo estelar,
¿recuerdas?).
Tu deseo de simplificar y de sentirte inspirado es impulsado
por el deseo de ser tu "yo" natural, es decir, la naturaleza de tu yo. Así que
camina o acampa en el bosque; nada en un río, lago o en el mar; siéntate frente
a una fogata, monta a caballo, o esquía en la nieve. Esto no significa que
tengas que darte unas vacaciones largas ni planearlas con meses de anterioridad:
no importa dónde vivas, a pocas horas siempre habrá un parque, campamento o
sendero que te permitirá disfrutar de la sensación de estar conectado con todo
el Universo.
6. Marca distancia entre tú y tus críticos
Decide alinearte con personas que también quieran encontrar
una inspiración simplificada. Dales una bendición silenciosa a quienes andan
buscando defectos o son amigos de las confrontaciones, y apártate de su energía
tan rápido como sea posible. Simplificarás tu vida enormemente si no tienes que
justificarte ante nadie, y si recibes apoyo en vez de críticas. No tienes por
qué soportar las críticas; simplemente agradece con amabilidad y promete pensar
en lo que te digan, pues representa un conflicto que no te permitirá sentirte
inspirado. No necesitas justificar tus deseos ni tu personalidad, pues esas
sensaciones internas son el Espíritu que te habla: son pensamientos sagrados,
así que no permitas que nadie los destruya.
7. Saca un tiempo para tu salud
Recuerda que el mayor problema de salud en nuestra sociedad
parece ser la obesidad. ¿Cómo puedes sentirte inspirado y vivir con sencillez si
consumes cantidades excesivas de alimentos y no haces el ejercicio que tu cuerpo
te pide? Recuerda que tu cuerpo es el templo sagrado donde vives durante esta
vida, así que saca un poco de tiempo cada día y haz ejercicio. Si sólo puedes
darle una vuelta a la manzana, simplemente hazlo. De igual manera, incorpora a
tu consciencia las palabras control de porciones: ¡tu estómago tiene el tamaño
de un puño, no de una pala! Respeta tu templo sagrado y simplifica tu vida
haciendo ejercicio y comiendo con moderación; ¡te prometo que te sentirás
inspirado si comienzas a hacerlo ya!
8. ¡Juega, juega, juega!
Simplificarás tu vida y te sentirás inspirado si aprendes a
jugar en vez de trabajar toda tu vida. Me encanta estar rodeado de niños porque
me inspiran con sus risas y su frivolidad. De hecho, muchos adultos me han
dicho: "Wayne, no has madurado: siempre estás jugando". ¡Esto es algo que me
enorgullece profundamente! Juego cuando hablo en el escenario, y juego mientras
escribo ahora.
Quiero aprovechar para darle las gracias a Howard Papush,
quien escribió un maravilloso libro titulado “Tiempo de receso: sorteando tu
vida en medio de las tensiones”, el cual te recomiendo (Howard también ofrece
seminarios en los que enseña a jugar y a divertirse). En su libro, Howard
comparte esta hermosa frase de Richard Bach: "Tu vida está orientada por un
aprendiz interior, por ese ser espiritual y juguetón que es tu verdadero yo".
Estoy totalmente de acuerdo: ¡por favor, entra de nuevo en contacto con tu yo
real y juguetón, y aprovecha la menor oportunidad para jugar! Verás que todo
será más dulce y más simple.
9. Disminuye el ritmo
Una de las observaciones más iluminadoras de Gandhi nos
recuerda que, "La vida es algo más que aumentar el ritmo". Este es un gran
consejo para simplificar tu vida; de hecho, disminuye el ritmo de todas tus
actividades durante un momento, aquí y ahora. Lee estas palabras lentamente.
Desacelera tu respiración para que seas consciente de cada inhalación y
exhalación...
Cuando vayas en tu auto, disminuye la velocidad y relájate.
Desacelera tu forma de hablar, tus pensamientos y el ritmo frenético de todo lo
que haces. Dedica más tiempo a escuchar a los demás; sé consciente de tu
inclinación a interrumpir y a dar por terminadas las conversaciones, y opta más
bien por escuchar. Detente y aprecia las estrellas en una noche despejada, o las
formas de las nubes en un día gris. Siéntate en un centro comercial y observa
cómo todas las personas parecen ir deprisa y sin rumbo alguno.
Si disminuyes el ritmo, simplificarás tu vida y te reunirás
con el ritmo perfecto con el que funciona la creación. Imagina que tratas de
forzar a la naturaleza halando una planta de tomate que acaba de brotar: eres
tan natural como esa planta, así que permítete estar en paz con la perfección
del plan de la naturaleza.
10. Haz todo lo posible para evitar las deudas
Recuerda que estás intentando simplificar tu vida, así que no
necesitas comprar objetos que la complicarán y la trastornarán. Si no puedes
adquirirlos, olvídate de ellos hasta que puedas hacerlo; al contraer deudas,
sólo agregas más capas de ansiedad a tu vida. Esa ansiedad te alejará de la paz,
que es el lugar donde te encuentras cuando estás en Espíritu. Si tienes que
trabajar más para pagar deudas, disfrutarás menos de tu vida actual; en
consecuencia, estarás más lejos de la paz y la alegría, que son los símbolos de
la inspiración. Te sentirás mucho mejor y disfrutarás tu vida si tienes menos en
vez de contraer deudas que no te darán paz y tranquilidad, sino estrés y
ansiedad. Y recuerda: el dinero que posees sólo es energía, así que niégate a
conectarte con un sistema energético que no es real.
11. Olvídate del valor efectivo
Procuro no pensar frecuentemente en el dinero, pues he
observado que las personas que lo hacen no piensan en casi nada más. Entonces,
haz lo que tu corazón te diga que es lo que te hace feliz, en vez de pensar si
será rentable o no. No te niegues a los placeres de la vida por razones
monetarias; no determines tus compras por el hecho de obtener un descuento, y no
te prives de sentir alegría porque no te hicieron una rebaja. Puedes llevar una
vida feliz y satisfactoria, y si en este momento estás pensando que yo tengo el
descaro de decirte esto porque tienes una situación financiera precaria, es
porque tú mismo has levantado tu propia barrera de resistencia.
Deja de ponerle una etiqueta con precio a todo lo que tienes
y haces: a fin de cuentas, en el mundo del Espíritu no hay etiquetas con
precios. No hagas del dinero el centro de todo lo que tengas o hagas; más bien,
descubre el valor inherente a todas las cosas: así simplificarás tu vida y
regresarás al Espíritu. Un dólar no determina el valor, aunque vivas en un mundo
que intenta convencerte de lo contrario.
12. Acuérdate de tu Espíritu
Si la vida te parece muy compleja, rápida, desordenada,
frenética, o difícil, acuérdate de tu propio Espíritu. Estás encaminado a la
inspiración, un lugar sencillo y pacífico en donde estás en armonía con la
sincronización perfecta de toda la creación. Viaja mentalmente allí y detente
con frecuencia para recordar lo que realmente quieres.
Wayne Dyer
"EL CODIGO DE SANACION EMOCIONAL" C.S.E.
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